El estado inca denominado el Tawantinsuyo, tiene una presencia histórica de no mas de 100 años entre los siglos XV y XVI. Los historiadores atribuyen la hegemonía de los Incas a partir de su victoria sobre los guerreros Chancas que ocupaban territorios en los actuales departamentos de Apurimac y Ayacucho. A partir de entonces el crecimiento y expansión territorial del Tawantinsuyo fue rápido y firme. La ocupación de territorios conquistados implicaba la construcción de edificaciones desde donde tendría que gobernar el estado Inca.
Es así que se tiene hoy evidencia de numerosos centros administrativos, tambos, y centros religiosos a lo largo y ancho del territorio inca, todos estos muy bien articulados por la asombrosa red vial del Qapacñan, que unía la costa sierra y selva, desde el sur hasta el norte de un gran territorio que ocupaba parte de los actuales paises : Perú, Bolivia, Argentina, Chile, Ecuador y Colombia.
Las construcciones incas en la Ciudad capital el Qosqo y los asentamientos ( llactas) y demás espacios de la zona de sierra y selva fueron levantadas en piedra, un material sólido, imponente, y duradero, que demostraba el poderío y permanencia del estado.
Se dice que la maestría con la que tallaron la piedra es debido a que contaron con maestros constructores del altiplano del Collao, quienes eran herederos de la tradición constructiva del Tiahuanaco.
Muchos estudiosos se han preguntado que técnicas e instrumentos han utilizado para realizar tales obras, hay varias teorías desde las mas lógicas hasta las mas atrevidas que sugieren la intervención de seres de otros mundos.
Les ofrecemos una muestra sintética de este trabajo pétreo, aun quedan muchas preguntas por responde, diariamente llegan miles de visitantes al Cusco y a otros lugares donde pueden admirar las obras incas en piedra, y todos quedan maravillados por la precisión de este trabajo.
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